La metodología Lean Manufacturing ha demostrado ser eficaz para transformar empresas por medio de la mejora en la eficiencia, reducción de costos, aumento de la calidad y la satisfacción del cliente.
En pocas palabras: maximiza el valor para el usuario final, eliminando desperdicios y optimizando los procesos. Esto ayuda a eliminar la sobreproducción, los elevados tiempos de entrega y agregar valor al trabajo.
¿Cuáles son las herramientas de mejora continua en Lean?
A grandes rasgos, las principales herramientas de lean manufacturing en las que se basa la metodología son las siguientes:
- 5S: Es un sistema de 5 pasos que inician con la letra S en japonés, consiste en la organización y estandarización del trabajo, en español se traduce como clasificar, ordenar, limpiar, estandarizar y sostener.
- Kaizen: Involucra a todos los niveles de la organización en la mejora continua, por medio de la búsqueda gradual y constante. A lo largo, se producen grandes cambios en los procesos de la compañía.
- Mapeo del Flujo de Valor (Value Stream Mapping): Ofrece seguimiento a cada paso de un proceso, logrando con ello identificar las actividades que aportan valor y las que solo llevan al desperdicio.
- Kanban: Es un sistema visual de gestión que por medio de tarjetas o señales controla el flujo de trabajo y ayuda a la producción bajo demanda. Con esto se logra la coordinación entre procesos, evita la sobreproducción y gestiona efectivamente los inventarios.
- Poka-Yoke: Previene errores o defectos, además que genera sistemas a prueba de fallos que reduce el retrabajo y garantiza la calidad.
- SMED (Single Minute Exchange of Die): Reduce dramáticamente los tiempos en los procesos de producción, por medio de la optimización en los tiempos de configuración y la flexibilidad en la manufactura.
- Jidoka: Es una automatización inteligente que se encarga de parar los procesos que presenten anomalías o defectos, logrando evitar la producción con defectos y logrando una mayor calidad. Esta detección temprana logra corregir desviaciones y minimizar desperdicios.
Este enfoque dinámico, se adapta a los cambios que puedan surgir en el mercado y brindando una ventaja competitiva en un entorno cada vez más exigente.
5S Lean Manufacturing: Organización y eficiencia
El objetivo principal de las 5S es crear y mantener un entorno de trabajo organizado, limpio y eficiente, eliminando desperdicios y facilitando la realización de tareas de forma más rápida y segura. Esto se logra a través de cinco pasos:
-
Seiri (Clasificación): Hace una distinción entre los materiales necesarios e innecesarios. Reduce el desorden y libera espacio, lo que evita la pérdida de tiempo en la búsqueda de herramientas o materiales.
-
Seiton (Orden): Establece un sistema que identifica los materiales que se utilizan diariamente para poder ordenarlos y mantenerlos siempre a la vista y reponerlos a tiempo. Tener las herramientas en un lugar específico, reduce tiempos de búsqueda y mejora la eficiencia.
-
Seiso (Limpieza): Se trata de mantener las instalaciones limpias y ordenadas, logrando que todo esté en perfecto estado siempre. La limpieza no solo previene problemas de seguridad y salud, sino que también favorece la detección temprana de fallas o desgaste en equipos.
-
Seiketsu (Estandarización): Distingue el tipo de situaciones (regulares o irregulares), lo que acelera la acción. Define estándares y procedimientos que aseguren que los tres pasos anteriores se mantengan de forma sistemática.
-
Shitsuke (Disciplina): Mantiene un lugar de trabajo que sigue las normas establecidas y estipula objetivos. Esto ayuda a evaluar situaciones determinadas para resolver fallos y prevenir errores en el futuro.
En resumen, la metodología de las 5S tiene como objetivo fundamental optimizar la eficiencia operativa mediante la eliminación de desperdicios, mejorando la seguridad, incrementando la productividad y promoviendo una cultura de mejora continua en la organización.
¿Cómo aplicar Lean Manufacturing en una empresa?
Para aplicar las herramientas lean de forma profesional y efectiva, lo primero es lograr un diagnóstico y análisis inicial que definan las actividades que aportan valor al cliente y las que se puedan eliminar.
El Value Stream Mapping, o Mapeo de la Cadena de Valor, es una herramienta fundamental en la gestión de procesos que permite a las organizaciones visualizar de manera clara y detallada cada uno de los pasos involucrados en un proceso específico. Esta técnica no solo se limita a representar gráficamente las etapas del proceso, sino que también proporciona un marco para analizar y comprender cómo fluye el trabajo desde el inicio hasta el final.
Al utilizar esta técnica, se pueden identificar cuellos de botella, que son puntos en el proceso donde se produce una acumulación de trabajo o donde la eficiencia se ve comprometida. Estos cuellos de botella pueden ser causados por diversas razones, como la falta de recursos, tiempos de espera prolongados o ineficiencias en la ejecución de tareas. Al localizarlos, las organizaciones pueden enfocarse en soluciones específicas para mejorar el rendimiento general del proceso..
Posteriormente se deben establecer metas claras y objetivos específicos, que sean medibles y alcanzables.
¿Te ayudamos a diseñar un plan de acción? Inscríbete a nuestra certificación en Lean Manufacturing en donde te ayudamos a crear un conocimiento sólido en este tema.