Los emprendimientos tecnológicos han explotado durante la pandemia a nivel mundial por Covid-19, pero los sociales, conocidos como de alto impacto, serán fundamentales tras la pandemia, según expertos.
Muchas de las startups y nuevos negocios buscan no solamente obtener una rentabilidad económica, sino que usan sus iniciativas empresariales para contribuir positivamente con el medioambiente y, cuando se termine la emergencia por el virus SARS-CoV-2, este tipo de emprendimientos podrán generar empleos y ser mayormente escalables.
Oportunidades en la crisis
De acuerdo con Gimena Sánchez, Entrepreneurship & Ecosystem Advocacy Director en Endeavor México, es en momentos de crisis en los que los emprendedores de este tipo encuentran oportunidades y crean soluciones con las que buscan impactar positivamente a la sociedad o al planeta.
“Estamos viviendo los efectos negativos en términos económicos, sanitarios, psicológicos, entre muchos otros, los cuales dejarán grandes problemas en nuestro país, pero estos emprendedores ven esos problemas y se enamoran de sus soluciones”, indicó Sánchez a Tec Review.
4 características de emprendimientos de alto impacto
Son ambientalmente sostenibles: Los productos ofrecidos y la marca apuestan por desarrollar una propuesta de valor que contribuya con el cuidado del medioambiente.
Escalabilidad: El modelo de negocios tiene la capacidad de crecer de tal manera que los ingresos se incrementan más rápido que sus costos debido a que suelen dirigirse a mercados con tendencia de crecimiento.
Generan impacto social: Crean valor para sus clientes, también crean oportunidades para poblaciones vulnerables y dan soluciones a problemas de una comunidad.
Pueden tener impacto global: Este tipo de emprendimientos y las soluciones que ofrecen tienen el potencial de impactar a nivel mundial ayudándose de herramientas como las redes sociales para encontrar aún más clientes, proveedores, aliados o socios.
De acuerdo con los estudios del Efecto Multiplicador de Endeavor, los ecosistemas de emprendimiento de este tipo cuentan con la participación y colaboración de diferentes actores como el acceso a la educación, financiamiento y mejores políticas públicas que propicien su desarrollo.
Para Sánchez, la llegada de los fondos internacionales, las historias de éxito de emprendedores de este tipo en la región y el talento muestran el gran potencial que se tiene para escalar y hacer rentables estos negocios.
Las ventajas
Para Juan Gabriel Pérez, director del articulador del sistema de emprendimiento e innovación Invest in Bogotá, asegura que el emprendimiento social debe ganar aún más relevancia en un escenario como el que atravesamos en el mundo actualmente.
“Luego de que podamos superar este reto que nos ha traído la pandemia vamos a necesitar más emprendedores que piensen en crear valor para sus empresas, pero también el aporte social. (…) Esto debería ir de la mano con un cambio en los hábitos de consumo de muchas personas, que van a buscar productos producidos de manera más responsable y que no tengan un impacto social, lo que abre más oportunidades para este tipo de emprendimientos”, indicó Pérez en entrevista.
Una ventaja de muchos de estos emprendimientos, según Pérez, es que dado su carácter social y teniendo en cuenta que aprovechan de manera muy eficiente los recursos, inicialmente no tienen grandes necesidades de capital, lo que les permite desarrollar modelos de negocio rentables hasta llegar a un punto en el que necesiten de capital u otro tipo de recurso para su crecimiento.
“En la medida en que estos emprendimientos reciban el apoyo que necesitan, no solo van a garantizar unos rendimientos económicos o un número de empleos, sino que ayduarán a solucionar problemas de la sociedad, convirtiéndose así en generadores de cambio”, indicó a Tec Review respecto a estos emprendimientos con propósito.
Publicación original de TecReview.
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