Si la meta es que la cuesta de enero sea hacia abajo y no hacia arriba, poner una tienda en línea es una buena idea. Te explicamos ¿Cómo emprender un negocio?
La tendencia registrada es alentadora, pues ocho de cada 10 usuarios de internet mayores de edad en México, han realizado alguna compra online, según un reporte de la Asociación de Internet MX.
Si ya hay planes de echar a andar un negocio, una tienda virtual de respaldo puede ser un diferenciador que potencie el éxito del emprendimiento. Y sin temores, porque no es necesario ser un prodigio del desarrollo web para conseguirlo.
“Las tendencias son que los consumidores están siendo más conocedores de los productos que tienen y muchas veces van directamente a las páginas de las marcas para comprarlos”, dice en entrevista para Tec Review, Juan Martín Vignart, country manager, en México, de Tiendanube, plataforma que permite al emprendedor hacer el espejo de su tienda física en el mundo digital.
Lo básico para comenzar desde cero
La tienda online debe tener el logo en un lugar visible, además de que la tipografía y la gama cromática tienen que llamar la atención.
También, de acuerdo con Vignart, es clave generar confianza con el consumidor, por lo que contar con el espacio de “quiénes somos” puede ser el camino para dar a conocer las virtudes de la marca y generar un vínculo con el cliente más allá de lo comercial.
“Tener un catálogo bien hecho con fotos de buena calidad es necesario en el mundo de las ventas online“, comenta este experto.
El espacio del “carrito de compras” debe estar completamente visible en la página de la tienda, además de que mostrar categorías y subcategorías de los productos ayuda mucho al cliente a mejorar su experiencia de compra, según este ejecutivo de Tiendanube.
“Hay que tener buenas descripciones de productos para que aparezcan en los rankings de Google”, agrega.
En este sentido, al poner el título a los productos, se debe pensar en cómo los clientes los buscarían en Google. Es recomendable que sea máximo de 70 caracteres y asignar una palabra clave a cada producto.
En el caso de la dirección URL, es crucial que sea clara y breve. Esto para contar con más probabilidades de que el buscador la muestre en los resultados.
¿Por qué no mejor delegar la tarea a los marketplaces?
Vignart aclara que aun cuando el tráfico en tiendas multimarca como Amazon o Mercadolibre suele ser más grande que el de las tiendas boutique, las redes sociales pueden hacer que la balanza se incline hacia el lado opuesto.
“Mucho tráfico está entrando por Facebook o Instagram en búsqueda de productos y de esta manera termina llegando a tiendas boutique online, en las cuales el vendedor tiene la posibilidad de controlar la experiencia que el cliente va a recibir, sin que aparezcan productos de la competencia”, explica.
Vignart advierte que aunque en los grandes mercados en línea se puede tener más visibilidad, en ellos el vendedor termina siendo un agente de un negocio que no es completamente suyo.
“Se deja de ser una empresa que atiende directamente al consumidor y uno se convierte en un proveedor de otro canal de distribución”, finaliza.
Artículo originalmente publicado en TecReview.
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