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Costos vs. Ingresos: ¿cómo encontrar el equilibrio perfecto?

Escrito por Vicerrectoría Educación Continua y Posgrados | marzo 12, 2025

Los costos e ingresos son parte fundamental de los estados financieros de una empresa. 

Identificar y controlar los flujos de activos puede ayudar a una empresa a mejorar su eficiencia financiera y asegurarse de que los recursos se utilizan de forma eficiente. 

Para quienes emprenden por primera vez, liderando pymes o startups, la relación entre los costos e ingresos y los tipos de gastos no siempre es sencilla de determinar, por lo que aquí te dejamos algunos ejemplos para que puedas mejorar la gestión financiera de tu empresa y escalar sus operaciones.

Tipos de costos: variables y fijos

Aprender a identificarlos es vital para alcanzar los objetivos de la empresa y con ello, la ansiada rentabilidad. También es importante para determinar el monto de capital que se necesita para operar. 

Costos variables

Son aquellos que cambian en proporción directa al nivel de producción o actividad de la empresa. Es decir, cuanto más se produce o se vende, más altos serán estos costos, pueden ser controlados a corto plazo.  Los más comunes son:

  • Materias primas: Los insumos necesarios para la producción de bienes, también pueden ser regresivos, es decir, a mayor nivel de compra, menor precio. 
  • Mano de obra directa: Los salarios de los trabajadores que están directamente involucrados en la producción, suelen ser progresivos cuando el pago es por hora. 
  • Comisiones de ventas: Pagos a los vendedores basados en un porcentaje de las ganancias.
  • Gastos de empaque: A mayor volumen, no solo aumentan los costos de producción, sino también los relacionados al embalaje o el packaging. 
  • Costos de Envío: Gastos relacionados con la distribución de los productos.

Costos Fijos

Se mantienen sin importar el nivel de producción o actividad de la empresa. Estos costos se mantienen constantes dentro de un rango relevante de producción. Algunos ejemplos son:

  • Alquileres: Pagos mensuales por el uso de instalaciones o equipos.
  • Salario de personal administrativo: Sueldos de empleados que no están directamente involucrados en la producción, como gerentes y personal de oficina.
  • Depreciación: Reducción gradual del valor de los activos fijos debido al uso y desgaste.
  • Seguros: Primas pagadas por pólizas de seguro de la empresa.

Por lo general, los gastos fijos se pueden anticipar y controlar, su precio se mantiene por un largo período de tiempo, son constantes y son fijos en su totalidad pero no en unidad.

Cómo identificar los gastos no esenciales

Son todos aquellos que no son necesarios para la producción de una empresa y que están más relacionados a los hábitos de consumo o estilo de vida. Algunos de los más comunes son:

  • Entretenimiento para directivos y empleados: Eventos, comidas, regalos exclusivos, etc. 
  • Viáticos: Vuelos en primera clase, alojamiento de lujo, congresos o capacitaciones no esenciales.
  • Mobiliario: Renovaciones de oficinas frecuentes, adquisición de muebles de alta gama, etc.
  • Marketing y publicidad: Costosas campañas que no tienen un retorno significativo de inversión o patrocinios que no están relacionados a la empresa. 
  • Otros son: suscripciones y membresías, adquisición de equipos tecnológicos no relevantes, cursos y seminarios que no aportan un valor real, contratación de consultores para proyectos no esenciales y servicios de outsourcing que no son críticos para las operaciones.

Para reconocerlos, se tienen que revisar minuciosamente los estados financieros, identificar patrones de gastos y resaltar todas aquellas transacciones que no son esenciales o cuyo monto es excesivo. 
A partir de ahí, es vital priorizar las necesidades de acuerdo a los objetivos, evaluar el valor real de cada compra, identificar y eliminar gastos hormiga y las compras compulsivas.

¿Cuál es el punto de equilibrio y por qué se debe analizar?

Cuando los costos de producción y las ganancias son iguales, es decir, están en un punto de equilibrio (también conocido como punto muerto), significa que no hay pérdida pero tampoco ganancias. 

Sin embargo, calcular el punto de equilibrio correctamente e identificar en qué tiempo se llegará a él, ayuda a determinar cuándo la empresa será rentable.

 

Estrategias para equilibrar ingresos, costos y gastos

Algunas iniciativas que puedes iniciar desde ya para ahorrar dinero y optimizar los recursos en tu empresa, son:

  • Control mensual de gastos
  • Control de flujo de efectivo
  • Invertir en tecnología o software para optimizar la eficiencia de la fuerza laboral
  • Analizar los procesos de la empresa y conocer los gastos de operación
  • Renegociar contratos con los proveedores y optimizar la cadena de suministro
  • Control de flujo de efectivo
  • Automatización y eficiencia
  • Reducir los gastos de oficina por medio de acuerdos de trabajo flexible
  • Análisis de costo-beneficio
  • Planificación a largo plazo
  • Cultura del ahorro. 

Implementar estas estrategias puede ayudar a una empresa a mantener un equilibrio saludable entre ingresos, costos y gastos, asegurando su estabilidad y crecimiento a largo plazo.

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