Una de las responsabilidades más importantes de un líder es apoyar el desarrollo de las habilidades y conocimientos de su equipo de trabajo. En teoría, este deberá establecer metas individuales que puedan ser alcanzables, alineados con los objetivos de la empresa que a su vez, aumenten la motivación de ese elemento de trabajo propiciando su desarrollo profesional.
Impulsar las aptitudes de tu equipo de trabajo es una tarea estratégica de alta relevancia para tu organización, ya que por medio de esta práctica podrás establecer una empresa mucho más sólida y competitiva.
Lamentablemente, muchos líderes o empresas no saben con exactitud qué hacer para incentivar y mantener constantemente el desarrollo de su equipo, motivo por el cual te compartimos estos 5 consejos para incluir en tu método hoy mismo:
Estructura relaciones sanas con tu equipo de trabajo.
Manejar una relación complicada con tu equipo de trabajo y estar al pendiente de desarrollar su potencial son dos ideas que ciertamente se contraponen. Para desarrollar un plan de crecimiento para ellos es importante establecer buenas relaciones de trabajo.
Date el tiempo de conocerlos más a fondo, entiende sus motivaciones y aficiones, de esta manera será más sencillo identificar el perfil de ese elemento para desarrollar sus áreas de oportunidad o brindarle nuevas responsabilidades.
Aprender a delegar.
A veces la presión, el compromiso o la responsabilidad que sentimos sobre un proyecto nos absorbe al punto de querer controlar cada estación del proceso, sin embargo, para que este o cualquier otro proyecto salga con una mayor calidad y en menor tiempo, es fundamental aprender a delegar.
Si realmente quieres desarrollar tu equipo de trabajo, es vital que entiendan cómo funciona cada punto de la operación, sus departamentos y áreas que lo componen; esto involucra confiar en tus colaboradores y por supuesto, en la metodología.
Delegar algunas tareas no quiere decir que te tengas que deshacer de aquellas que no te gusta hacer, sino de dotarles de responsabilidades según los perfiles que haz identificado en ellos personalmente para demostrar su potencial.
La retroalimentación es importantísima.
Dar una retroalimentación no significa reclamar o criticar de manera destructiva la labor de tus empleados o compañeros de equipo. Una sesión de retroalimentación deberá suponer un tiempo y espacio indicados para platicar sobre algunas recomendaciones de mejora y observaciones que les permitan seguir creciendo, mientras se mantienen motivados y en constante desarrollo.
Cuando brindes retroalimentación sé objetivo, humano y analítico con tus aportaciones; y permite que el empleado también explique el racional que le ha llevado a tomar esas decisiones operativas, de esta manera será más fácil detectar si el posible error se presentó en este u otros eslabones del proceso para su pronta solución.
Desarrolla su experiencia.
Poner en constante práctica las lecciones aprendidas a lo largo del camino es una herramienta muy valiosa para impulsar a tu equipo a explotar su potencial. Ofrece experiencias de trabajo que brinden en ellos oportunidades de aprendizaje y crecimiento dentro y fuera de los espacios de trabajo.
Integra nuevos elementos, delega responsabilidades de mayor valor, ofrece nuevos puestos de trabajo, toma en cuenta su opinión cuando sea necesario y hazlos sentir parte importante de la empresa.
Fomenta el constante crecimiento académico, profesional y personal.
Por último, estar al día con las tendencias, herramientas y mejores prácticas, es indispensable para un negocio o empresa en pleno 2021. Con la tecnología avanzando vertiginosamente y tantos cambios políticos, económicos y sociales alrededor del mundo, contar con un equipo preparado puede ser tu mejor arma para continuar desarrollando tu proyecto.
Busca cursos, posgrados, webinars, talleres y todos los materiales a tu alcance y ponlos a su disposición para continuar un desarrollo académico que sin duda, traerá resultados positivos a tu organización.
Ahora que has leído estos valiosos consejos, no dudes en ponerlos en marcha dentro de tu esquema de operaciones y comprueba tú mismo la efectividad de sus resultados a favor de tu empresa.
Recuerda que el crecimiento, la preparación y la motivación de tu equipo de trabajo son esenciales para el constante desarrollo de tu equipo, empresa o negocio. No seas solamente un jefe, conviértete en un gran líder.
Fuente: PeopleNext